Gran concurrencia del público cartero a pesar de la mala campaña y los seis partidos sin ganar. Está claro que el feriado, la tarde soleada y el hecho de ser el último partido del año como local sumaron, pero de todas formas las 800 personas que se acercaron al Alfredo Ramos son un número muy bueno.
Hubo muchísimo colorido como siempre, con los tirantes, los trapos cruzados y de alambrado de siempre y las sombrillas. El aliento fue casi todo dirigido al Juez Dalessandro y a Lamadrid palpitando el clásico que se jugará la próxima fecha. Hubo cantos como "a devoto lo vamos a prender fuego y este lunes a lama lo cojemos" y despedida al grito de "este lunes cueste lo que cueste tenemos que ganar". Además, sobre el final se ovacionó al Beto Yaqué por su retiro y a Diego Torres, hincha del club, que todavía no pudo debutar pero que cuenta con el afecto de la hinchada por su sentimiento cartero.
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