El pueblo cartero lo necesitaba; el pueblo cartero lo merecía. Después de seis partidos sin ganar, de estar cada vez más al fondo en los promedios nunca se escuchó un reclamo ni un cántico en contra de jugadores o cuerpo técnico. Y esta semana, se conocó el fallo del juez Dalessandro a favor de Moyano y la gente, desde el martes viene todos los días movilizándose y mañana lo seguirá haciendo, yendo a la legislatura a la asunción de Macri. Por todo este sufrimiento masticado y aguantado, una victoria como la de hoy fue un verdadero desahogo, para que entre tantas nubes oscuras haya por lo menos un rayito de sol.
El cartero ganó; y no sólo eso: de que forma lo hizo! Fue un partido completo de punta a punta. Se nota que con Gianfelice bien se genera una dupla muy peligrosa con Vaccaria (a pesar de que ninguno convirtió) y que Staino es un jugador diferente (hoy hizo dos asistencias), que rinde más cuando juega de enganche, pero que hoy, como volante por izquierda pero más suelto que en otras ocasiones, tuvo una tarde bárbara. Además, hay que sumarle una buena actuación del otro volante ofensivo que tuvo el cartero; Maxi Acosta. Además, fue vital encontrar un gol rápido, de pelota parada, que abrió el partido, porque cuando la Villa vino a buscarlo, Comu tuvo muchos espacios de contra.
En el primer tiempo Comu tuvo muchísimas situaciones, pero se encontró con un Volpe brillante (la figura del partido a pesar de los 3 goles que recibió) y además, un buen volumen de juego. San Carlos inquietó muy poco. Realmente no se vio ese rival tan duro que estaba en zona de reducido. Podrá haber tenido una mala tarde, pero no se puede quitar méritos al equipo local que hizo un partido redondísimo. El marcador, incluso, debería haber sido más abultado y usted, lector de Fiel a Comu, podrá corroborarlo en la sección "Minuto a Minuto" con la cantidad de llegadas claras que tuvimos. En el segundo tiempo el partido cayó en un pozo. Villa San Carlos salió a buscarlo más decididamente e incluso metió un cambio en el entretiempo. Pero el local se supo defender bien; salvo algunos errores de Otarola en las salidas, no inquietaron y los de Agronomía de contra, lo liquidaron: fueron lo efectivos que no habían sido en la primer etapa. El gol del final, a los 92 minutos, del ingresado Cogrossi fue el cierre de una tarde donde el márcador no podía terminar sin una goleada.
En el segundo tiempo, el Beto Yaqué se dio el gusto jugar unos minutos y de despedirse de la práctica profesional del fútbol como jugador y, a pesar de no haber disputado muchos minutos, fue reconocido por la gente de Comu. No hay dudas de que alguien que mantuvo un promedio de medio gol por partido en una trayectoria de 20 años, que jugó en los clubes que jugó y ganó lo que ganó debía ser reconocido y, los que amamos el ascenso, debemos sentirnos orgullosos de que un terrible goleador con más de 250 goles se haya retirado en el club más grande de la capital. Además, se dio el lujo de jugar unos minutos más en primera el hábil volante surgido de nuestras inferiores; Nicolás Paolorossi. En el banco quedó Dieguito Torres, hincha fanático del club, que ya tendrá su oportunidad de debutar. El otro que ingresó fue Cogrossi que, a pesar de no haber tenido un buen andar en los pocos minutos que estuvo, logró convertir el tercero.
Así, Comu respira un poco aliviado en los promedios y además, toma envíon para ir el lunes a jugar el clásico ante Lamadrid. Partido durísimo no sólo por la rivalidad si no porque en campos de juego de dimensiones reducidas al cartero le cuesta el doble (a pesar de que en Devoto el historial marca una amplia ventaja para Comu) como por ejemplo Defensores, Colegiales, Brown de Adrogué, canchas donde en los últimos años se ha ganado muy poco. Habrá que ganar, y para ganar se necesita jugar bien y mandar el equipo para adelante. Aunque en partidos de esta trascendencia, si se ganó; punto y aparte.
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