lunes, 22 de agosto de 2011

Es difícil digerir tamaña derrota y tener que sentarse a escribir acerca de un partido en el que el cartero cayó 6 a 1. Son varios los factores que hay que tener en cuenta para entender por qué ocurrió este desastre. Intentaremos desmenuzarlos uno por uno para todo aquél que no pudo venir o para aquellos que todavía no entienden como pasó lo de hoy.

Primero, hay que tener en cuenta uno de los factores principales de la derrota: las expulsiones. Las dos llegaron en momentos claves del partido e inclinaron la cancha. Ambas, estuvieron bien y la decisión de Gonaldi es irreprochable. Pero quizás, hay que recriminarle que no midió con la misma vara, no sólo en la segunda expulsión, si no en varias decisiones del partido. Recien comenzado el encuentro, no expulsó a un hombre de Brown que fue con las dos piernas para adelante. Sólo fue amonestado. La primera tarjeta roja llegó cuando el partido estaba empatado y para cualquiera de los dos, y además, obligó a hacer debutar a un pibe muy jóven en el arco (Germán Yacaruso, 18 años, surgido de la cantera del club), con la terrible responsabilidad de tener que atajar un penal. La segunda, a Maxi Acosta, fue cuando íbamos 1 - 2 y fue determinante, porque con la obligación de salir a empatarlo con dos menos, se dejaron muchos resquicios atrás que Brown, que tiene de mitad de cancha para adelante todos jugadores de buen pie, supo aprovechar.

En segundo lugar uno no puede dejar de ver, más hayá del condicionamiento de las expulsiones, de los errores que se vienen repitiendo partido tras partido. Errores defensivos a mansalva, volvimos a cometer un penal, el tercero en tres partidos. Es inadmisible que un equipo profesional cometa tantos penales. Otra vez nos hicieron un gol de cabeza. No el quinto o el sexto, cuando el partido estaba liquidado, el primero, apenas comenzado el partido, y los goles tempraneros modifican todo, son importantísimos. Está claro que hay deficiencias abajo y hay que trabajar para conseguirlas. Rocaniere de cuatro, Meloño con Strelau en el banco. Hay algunas cosas que no podemos permitir. Una defensa así es una ventaja muy grande para el rival.

Tercero, la falta de Otarola. El 1 es un jugador imprescindible en cartero y su lesión está haciendo estragos. De la Fuente, no parece estar a la altura de las circunstancias. Contra Barracas, no demostró seguridad y le hicieron tres goles. Contra Brown, en apenas 20 minutos se comió un gol (sale muy mal en el primero) y hace un penal tonto, seguido de su expulsión, que obligó al DT a buscar alternativas en un jóven arquero, surgido de las inferiores carteras. Si bien Yacaruso tuvo una buena actuación, tapando varias pelotas importantes cuando el partido iba 2 a 1, se tuvo que comer el garrón, en su debut, de que le conviertan cinco goles.

En cuarto lugar, aparece la capacidad del DT, Eduardo Pizzo. ¿Es casualidad que en el último año y monedas que dirigió a Comu nunca se haya dado vuelta un partido? No, es causalidad. Como también lo es que se sufra tanto con la pelota parada (¿qué se trabaja en la semana?) y en especial, y lo que más indigna a hinchas, sus planteos. El miedo a arriesgar, buscar siempre un punto, poner defensores... Con el partido 1 - 2 el DT decidió que era la hora de que ingrese Giambuzzi, y no un jugador ofensivo. Sus otros cambios, de poco sirvieron. Hay que tener en cuenta que Maxi Acosta se fue expulsado y eso nadie lo podía predecir, pero de una u otra forma, el cambio salió mal.
Errores que se ven en la cancha, son varios. Rocaniere de cuatro no responde, Meloño, sigue siendo titular y el Polaco espera en el banco. Staino juega por izquierda, con responsabilidades en la marca y no de enganche. A trabajar.

Obviamente, hay muchas cosas para trabajar y mejorar y así ver para que está el cartero. Hoy, lo más prudente es no arriesgarse dando predicciones. Algunas cosas esperanzan. El gordo es un fenómeno, Yaqué demostró que puede jugar 90 minutos, rendir y hacer un gol, Cogrossi es un jugador con muy buen pie que puede aportar mucho en la mitad, Yacaruso, que con tan sólo 18 años promete ser un gran arquero. Estos jugadores, más lo que mostró Vaccaría y la vuelta de Casini hay que saber amoldarlos a la base del equipo que logró 60 puntos y armar un equipo competitivo que mantenga la categoría. La B Metro es extraña, Almagro, la temporada pasada, se comió 5 con nosotros y después clasificó al reducido. No hay quebajar los brazos, que hay mucho que sacar adelante esta situación.

VAMOS CARTERO.



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